Escribir poesía que glose abiertamente lo social es siempre una aventura ardua; por eso, un reto como este, tan único e imprescindible, exige una lectura detenida y atenta que nos lleve a la reflexión. Los versos de la poeta merecen toda nuestra gratitud porque nos agrupan como especie y despiertan nuestra conciencia. Alicia ha realizado todo esto desde un campo tan difícil como la poesía, desde ese lenguaje tan sutil y complejo y, a la vez, tan directo y lacerante sobre nuestras emociones y sentidos.
Marina Tapia